Depósito de recambio

Dependiendo de su uso, los revestimientos de poliuretano de la máquina de acabado están sometidos a un desgaste de mayor o menor intensidad. Si la estructura de acero que se encuentra debajo termina apareciendo a la vista, en la mayoría de los casos es hora de que los depósitos reciban un nuevo revestimiento. Con el fin de alcanzar la misma calidad que disfrutan nuestros equipos nuevos, no revestimos nuestros depósitos en la fábrica en donde se encuentran sino en la nuestra. Para evitar tiempos de inactividad utilizamos depósitos de recambio. En otras palabras: usted trabaja con el depósito actual hasta que el depósito de recambio ya reparado y prácticamente nuevo haya sido recibido en su fábrica.

Y así es como transcurre el proceso:

• Cuando su máquina de acabado necesite un nuevo revestimiento, usted encarga un depósito de recambio a través de nuestro SERVICIO AL CLIENTE.
• En virtud del número de pedido, comisión o número de serie de su instalación elegimos la estructura de acero adecuada de entre nuestra selección de depósitos usados.
• En nuestra producción fabricamos una copia de su depósito.
• Si su máquina original dispone de un dispositivo separador, el depósito de recambio recibe uno nuevo (tapa y mecanismo de activación).
• Una vez listo, nosotros le enviamos el depósito de recambio y usted nos devuelve su depósito viejo y desgastado.
• Este depósito desgastado estará a la espera de volver a ser requerido como depósito de recambio, momento en el cual procederá a ser reparado debidamente.

A continuación describimos cómo tiene lugar este proceso.

Si el departamento de aseguramiento de calidad ha dado su autorización para renovar el depósito viejo, éste será llevado a nuestro departamento de reparaciones para su desmontaje. Al desmontar las piezas no es raro que salgan a la luz pequeñas sorpresas inesperadas.

Una vez decapado, el depósito vuelve a manos del equipo de reparaciones quienes, junto con el equipo de aseguramiento de calidad, determinan qué reparaciones son necesarias.

En nuestro ejemplo se recambia la pieza de apoyo de la tapa y se arreglan los daños en la estructura de acero soldándolos de forma profesional. Claro está que después de soldar retocamos la capa de adhesión. Es entonces cuando el depósito estará listo para recibir un nuevo revestimiento de poliuretano.

Concluidos los trabajos de soldadura, el depósito pasará a manos del departamento de poliuretano, donde:

• se adaptarán los moldes de acero segmentados especialmente diseñados,
• se calentarán en un horno tanto el depósito como el molde,
• se llenará el molde con una mezcla líquida de multicomponentes y poliuretano,
• se secará en el horno para una mejor reticulación del poliuretano,
• se enfriará el depósito a temperatura ambiente y se retirarán los moldes,
• se procederá a un tratamiento mecánico de los bordes y las rebabas de fundición.

Finalmente se procederá al montaje de los elementos de inserción en el depósito.

Tras la fase del barnizado volvemos al departamento de reparaciones. Se vuelven a montar las piezas a insertar y adosar que fueron ya debidamente adaptadas antes del barnizado. Después el depósito está listo para proceder al cambio del motor/de la unidad de desequilibrio. Usted puede realizar este cambio con ayuda de nuestras instrucciones. No obstante, le recomendamos que sea un técnico de servicio el que efectúe este trabajo en su fábrica para prevenir daños derivados a partir de un montaje inapropiado del motor o de la unidad de desequilibrio.

Nota importante: En muchas máquinas de determinadas series hay que darle la vuelta al depósito para fijar el motor o la unidad de desequilibrio. Si usted no dispone de ningún elevador apropiado preferimos realizar el montaje en nuestra fábrica. Aquí podemos realizar esta tarea en tan solo un día.

Tras los trabajos de montaje y ajuste aún se debe procesar la superficie de montaje del motor/la unidad de desequilibrio. Para ello se limpia y alija la superficie de montaje y después de la inspección, si es necesario, se rectifica.

En combinación con un sellado especial, esto es lo único que hace posible que la fuerza del tambaleo sea transmitida permanentemente al depósito. Si se omite esta operación, se desprenderán los pernos de fijación o incluso toda la brida de sujeción. La consecuencia en la mayoría de los casos es un siniestro total con un depósito desgarrado y una unidad de desequilibrio destrozada.

Por último deseamos mostrarle fotografías de una máquina Trowal que fue revestida por terceros y, lamentablemente, no para satisfacción del cliente. En este ejemplo, el revestimiento acababa de ser efectuado hacía tan solo unos pocos días. Aquí se volvió a montar la tapa vieja y desgastada en el depósito después de que éste hubiera sido provisto del revestimiento nuevo. Véase también lo mal amoldada que estaba la tapa.

Todo el depósito muestra formaciones de capas en el poliuretano. Normalmente estas formaciones hacen que se suelten grandes superficies durante el proceso de acabado. El nombre que le dan los expertos a este fenómeno es deslaminación, un efecto que puede surgir una y otra vez en revestimientos rociados según la temperatura y la humedad del aire.

Por desgracia, el que realizó el revestimiento también se atrevió a cambiar la unidad de desequilibrio, con el resultado de que los tornillos se desprendieron y la brida se desgarró. Afortunadamente, el daño fue detectado a tiempo y se pudo evitar la pérdida total del depósito.

Nuestra conclusión: Confíe mejor en el fabricante de su máquina de acabado, pues

SOLO TROWAL ES EL ORIGINAL.