En los talleres y empresas de reparación surge la necesidad de limpiar las piezas de las máquinas a conciencia antes de volver a montarlas, ya que las más pequeñas partículas de suciedad pueden provocar graves daños, por ejemplo, en un motor.
Utilizamos medios de procesamiento (compuestos) especiales, que desprenden la grasa a fondo. El efecto es especialmente intensivo, ya que debido a la colisión constante de los cuerpos abrasivos con la superficie de la pieza el compuesto entra en contacto intensivo con la suciedad, desprendiéndola también mecánicamente.